El primer paso para llegar a un implante exitoso es realizar un buen diagnóstico.
El éxito en el tratamiento de implantes depende de una cuidadosa planificación prequirúrgica. Además de una completa anamnesis y un examen clínico de evaluación radiográfica es esencial para determinar las características radiológicas de las futuras regiones implantarias, y de esta manera poder reducir la incidencia de complicaciones quirúrgicas.
Por otro lado hay muchas razones que confirman la ayuda proporcionada al obtener imágenes en 3D tanto para facilitar un correcto diagnóstico como para observar el volumen y la forma de diferentes lesiones periapicales y periodontales; además de estructuras anatómicas de gran importancia, tales como conductos dentarios, el conducto nasopalatino, los senos maxilares, las fosas nasales.
En esta revisión, se presentan las principales técnicas empleadas en el diagnóstico y planificación de implantes orales.
Diagnóstico Radiológico en Implantología
Dado que el tratamiento implantológico es sumamente importante, es indispensable emplear radiografías, para así evaluar los factores anteriormente expuestos y poder informar a los pacientes sobre la futura rehabilitación, controlando radiográficamente la estabilidad del implantes.
Actualmente son muchas las opciones disponibles para la planificación prequirúrgica de implantes.
Desde la utilización de radiografías periapicales, que por su naturaleza dan información bidimensional de las imágenes siendo evidente la ausencia de la dimensión vestíbulo-oral. En este caso el cirujano tomará el riesgo de encontrar un remanente óseo estrecho.
Respecto a la radiografía panorámica, actualmente constituye una importante herramienta de diagnóstico por imagen en la práctica diaria, pues informa de la localización de diversas estructuras. Sin embargo, nos presenta una magnificación en la dirección horizontal y vertical. Si tenemos en cuenta la presente afirmación, es recomendable que todos los odontólogos tomarlo en consideración al encontrarse con pérdidas mayores de 10 mm, donde hará falta una información más detallada de la altura ósea y la dimensión vestíbulo-oral; a través de técnicas radiológicas especializadas TC. Es por este motivo preferible suplir este examen por alguna forma de tomografía de cortes axiales, realizados tanto en tomografía axial computarizada como en Tomografía Espiral y donde es posible observar el ancho, la altura y la anatomía de los remanentes óseos en relación a estructuras anatómicas de importancia.
En la tomografía espiral la magnificación es de 1.5 y la calidad de imagen depende en gran parte del posicionamiento del paciente además de la calibración del equipo. Así mismo la radiación es considerablemente menor con tomografía espiral que con tomografía computarizada multicorte (TCM).
Así pues, es preferible usar la (TCM) si queremos ver el maxilar completo, ya que en estos casos se necesitarían muchos cortes tomográficos.
En el caso de la TCM las imágenes obtenidas tienen una relación 1:1 aumentando la precisión.
Actualmente se han desarrollado muchos software especializados para efectuar imágenes reformateadas a partir de cortes transversales, el más conocido, Dentascan, nombre dado por la compañía que apoyó su desarrollo su desarrollo, y que posteriormente pasa a ser genérico para los programas de reformateo dental de otras compañías, generando reconstrucciones transversales de los maxilares.
Así mismo, la disponibilidad de información tridimensional permite la fabricación de guías quirúrgicas para guiar la colocación de implantes orales. Hay disponibles en el mercado diferentes softwares que permiten crear una planificación para la colocación ideal de los implantes, tanto en 2D como en 3D, teniendo en cuenta las consideraciones clínicas y las estéticas. En este momento esta tecnología esta siendo constantemente innovada.
Aunque hay excelentes resultados post-quirúrgicos, estos avances en técnicas radiológicas resultan en un incremento en la dosis de radiación, no siendo el caso de la denominada Tomografía volumétrica del haz de Cono (CBCT), que actualmente está revolucionando la odontología moderna. Dentro de las ventajas de este aparato podemos mencionar que reduce la radiación y el costo es inferior a un Tomógrafo Computarizado.
Numerosos estudios han demostrado la excelente relación y exactitud en mediciones lineales de estructuras asociadas al área dento-maxilar. Así mismo Loubele y colaboradores demostraron la alta resolución en la observación del ligamento periodontal y la lámina dura en un estudio sobre la calidad subjetiva de las imágenes. Por otro lado Honda y colaboradores demostraron la superioridad de la calidad de las imágenes adquiridas con esta nueva tecnología frente a imágenes adquiridas con un tomógrafo computarizado.
Cabe destacar que hay algunos modelos que tienen mayor amplitud en la selección del área a escanear, estos límites varían entre 4 a 14 cm, parámetros que hay que considerar para calcular la dosis de radiación ya que a mayor área escaneada mayor será el tiempo de irradiación. Cada modelo posee diferentes aplicaciones y características que deberán ser dominadas por el operador, cuya habilidad garantizará una calidad óptima de área diagnóstica requerida.
Conclusiones
Hemos realizado una pequeña exposición de los principales sistemas radiológicos empleados actualmente en la planificación de implantes orales, estos paulatinamente serán reemplazados por imágenes radiológicas en 3D. Cabe destacar nuestra labor, dentro de la Odontología, reduciendo en lo posible la dosis de radiación, y al mismo tiempo beneficiar al paciente con la tecnología digital. Ciertamente, se puede concluir que la tomografía volumétrica con haz de cono conduce al tan ansiado éxito quirúrgico en implantología, además sus múltiples aplicaciones aportan nuevos horizontes para las demás especialidades odontológicas.
Dr. Mario Adolfo Errecaborde
Odontólogo Especialista en diagnóstico por imágenes buco-maxilo-facial.
Ex Jefe de trabajos prácticos de la Cátedra de Radiología UBA.